Saben aquella canción de música caribeña: “ el venao, el venao” pues en Europa se canta otra que es “el mandao, el mandao”.
La espectacular bajada que marca hoy la prima de riesgo no es obra de Mario Draghi, aunque el mercado se haya vuelto como loco al escuchar decir al presidente del Banco Central Europeo que es su responsabilidad relajar las tensiones de la deuda. No, Draghi es el autor material pero la promotora intelectual es Angela Merkel, que está empezando a ver las orejas al lobo.
Justo cuando Angela Merkel está a punto de irse tres semanas de vacaciones -igual que su ministro Schäuble- Moody's ha puesto en perspectiva negativa el "intocable" rating triple 'A' de la locomotora europea y como suele ser habitual, un par de días más tarde le ha metido un hachazo en toda regla a sus bancos.
Los analistas americanos creen -con razón- que de seguir así las cosas existen muchas posibilidades de que España e Italia necesiten más apoyo financiero, dicho suavemente. Pero con una exposición a nuestro país de 700.000 millones de euros, eso implicaría simple y llanamente el entierro de la moneda única. Y claro, hay que ir retocando las calificaciones no sea que a las agencias les pillen en un renuncio parecido al de Lehman. Y es muy probable que de seguir así las cosas le llegue un aviso a Francia.
La cuestión es que a Merkel no le ha gustado la posibilidad de perder la triple 'A', lo que significa que los grandes fondos del mundo que invierten en máxima calidad tendrían que dar de lado los bonos germanos. Y claro, ya que Alemania se está financiando prácticamente gratis no es plan de perder clientes. Además, es de suponer que Merkel quiere tener un verano tranquilo.
Por eso no se engañen. Draghi tiene poco que ver con esto. "Nuestra función consiste en asegurar la estabilidad de los precios y contribuir a la estabilidad del sistema financiero con una completa independencia", dijo el sábado Draghi en una entrevista con 'Le Monde' en la que aseguraba que el BCE no puede resolver los problemas financieros de los estados.
Dos días después, Moody's colocaba a Alemania en perspectiva negativa. Y hoy han sido sus bancos los que se han llevado el recorte.
En total, ni cinco días han pasado desde que Draghi habló para el rotativo galo y hoy suelta:
"El Banco Central está dispuesto a hacer todo lo que sea necesario para preservar el euro y, créanme, eso será suficiente".
Draghi ha destacado también que "en la medida en que las primas de riesgo dificulten el funcionamiento de los canales de transmisión de la política monetaria, caen bajo nuestro mandato".
Y pensar que estamos en sus manos………………me pone los pelos de punta.